DOMINGO, 16 de noviembre 2025

DOM, 16/11/2025

PROFESIONALES

Un año de la DANA: Los veterinarios de Valencia destacan la solidaridad y el trabajo del colectivo en el desastre

Cuando se cumple un año desde el desastre de la DANA, el Colegio de Veterinarios de Valencia ha querido hacer un homenaje al trabajo de sus colegiados en medio de la catástrofe

El Colegio de Veterinarios de Valencia ha destacado el papel de sus colegiados en medio de la catástrofe de la DANA.
El Colegio de Veterinarios de Valencia ha destacado el papel de sus colegiados en medio de la catástrofe de la DANA.

Un año de la DANA: Los veterinarios de Valencia destacan la solidaridad y el trabajo del colectivo en el desastre

Cuando se cumple un año desde el desastre de la DANA, el Colegio de Veterinarios de Valencia ha querido hacer un homenaje al trabajo de sus colegiados en medio de la catástrofe

Redacción - 29-10-2025 - 12:41 H - min.

Este miércoles, 29 de octubre, el Colegio de Veterinarios de Valencia (ICOVV) ha recordado el primer aniversario de la DANA, las catastróficas inundaciones que afectaron a la región, subrayando la “solidaridad, la entrega, la humanidad compartida” que emergió tras la destrucción. En esta fecha, el ICOVV ha dedicado unas palabras a quienes lo perdieron todo y de aquellos que ayudaron “sin pedir nada a cambio”.

El Colegio ha destacado específicamente el papel de sus colegiados y colegiadas, quienes estuvieron presentes desde sus “clínicas, sus hogares o su trabajo silencioso”. Su contribución se centró en garantizar “la seguridad, la prevención y el bienestar de todos".

Desde el ICOVV enfatizan que su profesión se basa en “estar, de cuidar, de no rendirse”. El Colegio afirma que “no olvida” lo sucedido, y aseguran que la institución “sigue aquí, acompañando, apoyando y recordando a todos los que formaron parte de aquellos días”.

El comunicado concluye anunciando un vídeo como “pequeño homenaje” a todas las personas que participaron en la respuesta a la catástrofe.

EL DRAMÁTICO TESTIMONIO DE MARÍA VITORIA: LA VETERINARIA PREMIADA POR SU LABOR EN LA DANA

Con motivo de la catástrofe provocada en Valencia por la DANA, Animal’s Health entrevistó a la veterinaria María Vitoria, directora de la Clínica Veterinaria Sedaví-Vet Partners, cuyo centro quedó arrasado.

María Vitoria, galardonada con el Premio Bienestar Animal de Animal's Health por su labor protegiendo a los animales durante la DANA de Valencia, relató cómo su clínica estaba abierta cuando sobrevino el temporal.

“Yo no sé por qué, me puse muy nerviosa y me levanté con mis dos hijas del dentista y dije que no me atendieran, que me quería ir. No estaba lloviendo, nadie nos dijo nada, pero me fui directa a la clínica”, rememoró la veterinaria.

Al llegar, Vitoria aconsejó a sus compañeras que se marcharan lo antes posible y se llevó a un perro que estaba ingresado a su propia casa. Según su testimonio, “en quince minutos, desde que yo estuve en la clínica hasta que logré llegar a mi casa con el perro ingresado, el agua llegaba al cuello. Y nadie, nadie, nadie, nos avisó de nada”.

ESPERANZA MONTANER: LA DANA DESDE UN HOSPITAL VETERINARIO

Animal’s Health también habló con la veterinaria Esperanza Montaner, directora del Hospital Clínico Veterinario del CEU, y reconocida con el Premio Joven Talento de Animal's Health.

Tras el desastre de la DANA, que dejó una importante cifra de muertos y desaparecidos y arrasó con centros veterinarios, se contaron por miles los voluntarios de todas las ramas profesionales que se lanzaron a ayudar, incluidos los veterinarios, que se mostraron especialmente solidarios y se convirtieron en auténticos héroes.

Montaner, que se mostró “cansada y con la emoción a flor de piel”, explicó que por la carga de trabajo posterior a la DANA había “perdido la noción del tiempo”. La directora del hospital señaló que los días estaban siendo complicados “tanto física como mentalmente”.

Al hablar del “trabajo incansable de su equipo, de los estudiantes de Veterinaria del CEU y de los voluntarios”, Montaner tuvo que hacer una pausa tratando de contener unas lágrimas que al final acabaron brotando.

 

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