SÁBADO, 27 de abril 2024

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MASCOTAS

Los perros pueden sufrir lesiones a la hora bajar de los coches

Un estudio revela que la altura del maletero de un coche influye en el esfuerzo que realiza el animal para bajarse de un salto, aumentando el riesgo de lesiones en sus patas

Los perros pueden sufrir lesiones a la hora bajar de los coches

Los perros pueden sufrir lesiones a la hora bajar de los coches

Un estudio revela que la altura del maletero de un coche influye en el esfuerzo que realiza el animal para bajarse de un salto, aumentando el riesgo de lesiones en sus patas

Javier López Villajos - 22-06-2018 - 14:00 H - min.

Con el buen tiempo, empiezan a producirse las escapadas en coche donde también va el perro. Y al llegar al destino, se abre el maletero donde suele ir el animal, dejando que se baje de un salto. Sin embargo, una investigación realizada por David Pardey, Gillian Tabor, James Andrew Oxley y Alison P. Wills revela que las patas delanteras del perro pueden resentirse por la fuerza y la presión que ejerce al realizar este gesto, teniendo en cuenta la altura del maletero del vehículo.

El estudio, pionero en la investigación de la cinética que produce este tipo de movimientos, indica que la simple acción de bajar del coche dando un salto hace que el perro ejerza una presión excesiva sobre sus patas delanteras, lo que aumenta el riesgo de que sufra alguna lesión durante la amortiguación.

EXPERIMENTO SOBRE LA PRESIÓN A DIFERENTES ALTURAS

Para determinar la relación entre la altura del vehículo y la presión que ejerce el animal para salir, se realizó un experimento con 15 perros adultos que saltaron tres veces para bajar de vehículos que se encontraban a diferentes alturas: 0’55, 0’65 y 0’75 metros. El objetivo era medir la fuerza que empleaba el animal en cada uno de los saltos y el resultado fue que un pequeño aumento en la altura del coche alteraba significativamente la cinética del aterrizaje o dicho de otra forma, que las patas delanteras del perro sufrían más presión a medida que aumentaba la altura del vehículo desde el que tiene que saltar.

Aunque reconocen que deben continuar trabajando en este caso de estudio, los investigadores concluyen que esta “es la primera evidencia objetiva de que permitir que los perros salten de un vehículo es desaconsejable”, teniendo en cuenta la recumbencia o el período de tiempo que el animal se pasa en el coche sin hacer ningún tipo calentamiento previo al salto, además de las condiciones del suelo que amortiguan el aterrizaje, ya que en conjunto, todos estos factores pueden sobrecargar la estructura anatómica de las patas del animal. 

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